“Javier es un joven de 23 años que es ingresado en
el hospital debido a un cuadro de sobredosis. Es entonces cuando su madre,
Rosa, comienza a sospechar de la adicción de su hijo a las drogas. A pesar de
que al principio los indicios no son muy claros, poco a poco la mujer se va
convenciendo de que su hijo realmente tiene un problema.
Sin embargo, dicho problema se acentúa al ser Javier
mayor de edad y verse Rosa atrapada en un laberinto burocrático que impide
poder ayudar a su hijo tal y como ella quisiera. Además, no sólo la mala
situación económica por la que atraviesa la familia empeorará las cosas sino
que poco a poco todos sus miembros se verán afectados por los problemas de
Javier.
Sin amigos, sin trabajo y con toda la familia en su
contra, la única esperanza de Javier para superar su adicción será su madre.
Rosa deberá comprender que su hijo está enfermo y es por ello que tendrá
anteponerse a todo, incluso al carácter agresivo que éste ha desarrollado, si
quiere recuperar el que una vez fue un chico atento, cariñoso y de gran
corazón.”